Consejos para nadadores principiantes en Aguas Abiertas
Práctica, práctica y más práctica…
Cuanta más experiencia adquieras nadando en aguas abiertas antes de la carrera, mejor. Como en cualquier deporte, cuanto más practiques la natación en aguas abiertas, más seguro y cómodo te sentirás. Suena simple y realmente lo es, pero practicar es lo mejor que puedes hacer para ir sintiéndote cada vez más cómodo y con más confianza nadando a mar abierto.
Selección de goggles
Los goggles de natación vienen en todas las formas, tamaños y colores. Cuando se trata de nadar en exterior, hacer la selección adecuada de los goggles marcará la diferencia.
La selección de los goggles se hará dependiendo de las condiciones climáticas. En un día nublado o lluvioso, puedes optar por goggles con lentes transparentes, azul claro o amarillo. Estas tres opciones te facilitarán la visión. Si, por el contrario, es un día soleado, las lentes “de espejo” o “de humo” serán tu mejor opción.
También puedes optar por llevar un segundo par de goggles a cada carrera. De esta forma puedes tener un juego de gafas claras y otras de humo para elegir, dependiendo del tiempo que haga o en caso de que se te rompa o extravíe el primer par tengas uno de repuesto.
Realiza un buen calentamiento
Realizar un buen calentamiento antes de la carrera es esencial para empezarla bien. Si calientas antes de todos tus entrenamientos, el día de la carrera no debería ser diferente.
Si está permitido entrar en el agua antes de la carrera, calienta durante aproximadamente 15 minutos. Esto conseguirá que tu sangre fluya y vaya preparando al cuerpo para lo que le viene. Además, tendrás la oportunidad de adaptarte al agua e ir acomodándote para la carrera.
Posiciónate correctamente en la salida
Si eres un nadador experto, ponte delante y en el centro del grupo de salida. Si aún eres principiante, colócate detrás y hacia un lado.
Una vez se dé la salida, tómate un tiempo para entrar y ve acostumbrándote al agua. Notarás que prácticamente no podrás nadar cómodo debido a la cantidad de participantes. No tengas prisa, no hay razón para luchar contra el caos. No te preocupes por perder unos segundos en la salida, porque cuanto más cómodo te sientas, mejor será tu nado.
Empieza despacio
Cuando dan la salida, la adrenalina se dispara. A algunos principiantes en aguas abiertas les cuesta contenerse y empiezan a nadar demasiado rápido. A menudo, no se dan cuenta de esto hasta pasados unos 100 o 200 metros, cuando su ritmo cardíaco está por las nubes y están jadeando por encontrar algo de aire.
En lugar de empezar como un loco y luchar por terminar, intenta empezar más despacio que el ritmo de carrera y aumenta la velocidad poco a poco a medida que empiezas a tomar ritmo. De esta manera, conseguirás terminar más fuerte.
Cálmate si entras en pánico
Por último, no es raro que los atletas con menos experiencia tengan algo de ansiedad o incluso entren en pánico mientras nadan en aguas abiertas. Si esto sucede, intenta calmarte. Lo mejor es hacer una pausa y recuperarse por un momento. Intenta darte un tiempo para tratar de relajarte. Esa pausa ayudará a que tu ritmo cardiaco comience a estabilizarse poco a poco. Cálmate si entras en pánico
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